CLC incorpora en sus actuaciones medioambientales un Comité Científico independiente
Coordinado por la Fundación Migres
- Cuenta con expertos del CSIC y de Universidades en tratamiento de aguas, metales pesados, química atmosférica, geotecnia y biología.
- Cobre Las Cruces busca establecer un modelo pionero para la industria minera sostenible del siglo XXI.
La compañía minera Cobre Las Cruces busca establecer un modelo pionero en la industria minera del siglo XXI al incorporar un Comité Científico multidisciplinar que, de manera independiente, contribuirá a mejorar los procesos relacionados con la gestión del agua, la detección y eliminación de metales pesados, la química atmosférica y la geotecnia, entre otras actuaciones.
Cobre Las Cruces -entre cuyos principales compromisos se encuentra el desarrollo minero-industrial sostenible- ha firmado un Convenio de Colaboración con la Fundación Migres, institución experimentada en la evaluación de las actuaciones de las que se derive impacto ambiental en el medio natural, para la realización de actuaciones de investigación científica y desarrollo tecnológico.
Para llevarlas a cabo, la Fundación Migres ha constituido un equipo científico integrado por relevantes expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de distintas Universidades, todos ellos investigadores de la máxima cualificación en gestión de aguas, hidrogeología e hidrogeoquímica, desarrollo de biosensores, química atmosférica, geotecnia y biología de la conservación.
La creación de este Comité Científico diseña un modelo pionero en la industria de la minería. El Comité Científico llevará a cabo un estudio global inicial que permita identificar y contribuir a resolver las distintas cuestiones asociadas a la actividad empresarial de CLC referidas a las aguas, movimientos de tierras, restauraciones y emisiones atmosféricas, así como un análisis sobre posibles efectos en la biodiversidad incluyendo la flora y fauna de la zona, con especial incidencia en las aves.
AGUA
El Comité Científico es plenamente consciente de los retos que se derivan del uso y gestión de las aguas, y de los niveles de metales pesados y metaloides presentes de manera natural en el acuífero niebla-Posadas, que se movilizan como consecuencia de las actuaciones directas e indirectas en la mina.
Los usos de las aguas del proceso minero requieren de análisis profundos del sistema que contemplen su posible afección a los ecosistemas circundantes. Por ello, el Comité Científico realizará un análisis de la calidad del agua subterránea de la zona de influencia de la explotación minera y evaluará la hidroquímica y la hidrodinámica de las aguas relacionadas con el proyecto, contribuyendo también a la realización del modelo hidrogeológico que está realizando Cobre Las Cruces para conocer con exactitud la calidad y variabilidad del acuífero Niebla-Posadas. Los expertos evaluarán y modelizarán, igualmente, el efecto del vertido autorizado sobre el río Guadalquivir.
ATMÓSFERA
Respecto a los niveles y a la geoquímica de las partículas atmosféricas, la finalidad del Comité Científico es conocer la influencia que este material ejerce sobre la calidad del aire. En este sentido, Cobre Las Cruces implementa desde el inicio de su actividad todos los requerimientos legales, tales como control de gases, partículas atmosféricas (PM10 y TSP) y metales legislados (As -metaloide-, Ni, Pb y Cd). El Comité Científico irá más allá y controlará 65 elementos y compuestos inorgánicos, explicando la totalidad de la masa de las partículas.
Además, el estudio de los posibles focos de contaminación difusa, que no se ha abordado hasta el momento en ninguna actividad industrial, constituye un tema de investigación novedoso y de gran importancia medioambiental.
FLORA Y FAUNA
De la actividad minera pueden derivarse concentraciones de diversos metales y metaloides. Con el fin de determinar los niveles en los organismos que habitan en el entorno de la mina se tomarán muestras a distintas escalas del ecosistema; de este modo, podrá evaluarse si estas concentraciones van acumulándose a lo largo de la cadena trófica: desde los productores primarios hasta las plantas, pasando por los consumidores intermedios (como los invertebrados) hasta los depredadores, aves y mamíferos. También podrán analizarse las repercusiones sobre estas poblaciones, independientemente de que se estén superando o no las concentraciones máximas permitidas para estas sustancias.
El equipo científico abordará también el seguimiento de la calidad ecológica y propondrá un plan de mejora ambiental y de rehabilitación la balsa de acumulación de agua de la mina para incrementar la biodiversidad actualmente existente en la zona.
BIOSENSORES DE ÚLTIMA GENERACIÓN
Para la monitorización y la ‘detección inteligente’ de los niveles de metales pesados y otras sustancias en las aguas subterráneas el equipo científico está desarrollando sensores biológicos que permitan determinar en tiempo real y de manera continua sus niveles y evolución.
Un biosensor es una herramienta o dispositivo que combina un elemento biológico capaz de reaccionar o detectar la presencia de alguna sustancia específica en el medio y un transductor cuya función es transformar la respuesta del elemento biológico en una señal cuantificable. Dicho de otro modo, estos dispositivos transforman una señal bioquímica en otro tipo de energía que puede ser cuantificada.
El arsénico se encuentra entre los 20 elementos químicos más abundantes de la corteza terrestre, siendo por tanto su presencia muy significativa en el medio ambiente. El objetivo principal del Comité Científico es construir y validar el uso de biosensores de arsénico para la monitorización en tiempo real de este elemento en aguas o efluentes industriales. Los biosensores cumplirán dos requisitos fundamentales: ofrecer la posibilidad de realizar mediciones adaptadas a las necesidades específicas de Cobre Las Cruces y proporcionar de una manera rápida y fiable información sobre la concentración de este metal, permitiendo de esta forma la toma rápida de decisiones en caso de que éstas fuesen necesarias.
ALTERNATIVA BIOLÓGICA PARA LA ELIMINACIÓN DE ARSÉNICO
De manera simultánea, el Comité Científico está desarrollando una alternativa biológica para la eliminación de arsénico en aguas subterráneas por precipitación. Entre los microorganismos de mayor interés se encuentran las bacterias reductoras de sulfato, que reducen el sulfato a sulfuro para así poder precipitar los metales como sulfuros metálicos que son, en general, poco solubles. Mediante esta vía, los metales pueden ser inmovilizados y fácilmente eliminados, lo que convierte a este proceso en una alternativa a los tratamientos físico-químicos convencionales.
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